Suelta, nunca sola
Libre, nunca sola
Emancipada, nunca sola.
Tu soledad parecía un mandato, un decreto,
una historia relatada con final cerrado
Pero hay otra verdad:
No hay trincheras suficientes
para refugiarte del amor
y las balas te van a alcanzar
y está bien que así sea.
Como van a alcanzarte las manos
cuando extiendas la tuya al cerrar los ojos
Sólo entonces sabrás que la batalla está ganada
Que ya no más sola ni en silencio.
Abrí tus ojos otra vez:
bienvenida a la red.
Junio, 2014.
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Facilitadora en Fase de Titulación, EBBA Dique Luján
Facilitadora en Fase de Titulación, EBBA Dique Luján
